jueves, 1 de febrero de 2007

Se empiezan a frenar los juicios, ¿los represores morirán de viejos pero impunes?

Una información publicada ayer da cuenta de que en la provincia de Córdoba los juicios a los represores de la última dictadura (a pesar de la derogación de las leyes de Punto Final y de Obediencia Debida, y de toda la demagogía oficial) y de los recién planteados hacía los responsables de la versión local de la Triple A, el Comando Libertadores de América (CdeA) están totalmente paralizados.

Rubén Arroyo, ex integrante de la Conadep, y abogado de familiares de detenidos desaparecidos declaró que "ante la evidente paralización de las causas sobre el terrorismo de Estado, que los propios funcionarios admiten, es inocultable que no habrá juicios orales en el corto plazo, y a este paso, nunca. Es un eufemismo hablar de mora ante la renuencia de los responsables de impulsar acciones penales en las causas más resonantes".

Esta situación refuerza la idea de que el gobierno de Néstor Kirchner hizo derogar las leyes que protegían judicialmente a los criminales para evitar las extradiciones a España, Francia e Italia. En un acuerdo con la cúpula de las FF.AA., a partir de ese momento se iba a entrar -lo estamos viendo- en una maraña judicial que durará muchos años. Para ese entonces la mayoría de los acusados habrá muerto o estará cerca de ello, como Pinochet. Quedarán entonces impunes y sin castigo.

La lucha por el juicio y castigo a los represores continúa vigente.

Milton Dumas

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